La borrasca Nelson ha llegado a Vélez Rubio aguando el Domingo de Resurrección. La luz y el color de esta jornada ha estado marcada por negros nubarrones que desde bien temprano descargaban sobre la villa velezana. 

La Ilustre Cofradía del Santísimo Cristo del Perdón y de los Afligidos a las 9:30 de la mañana hacía un comunicado anunciado el retraso de su salida hasta la 12:00 del mediodía, modificando por completo el recorrido para llegar desde el convento de la Inmaculada a la iglesia de la Encarnación lo más rápido posible para encontrarse Jesús Resucitado con la Virgen de la Encarnación. 

La lluvia no ha podido con la ilusión y la fe de unos pocos nazarenos y mantillas, que bajo la lluvia se concentraban en el convento a la espera de que dejara de llover. Y al final, el tiempo ha dado una tregua y ha salido el sol permitiendo que la Cofradía pudiera salir y hacer una estación de penitencia algo diferente pero llena de fe y esperanza. La mirada puesta en la imagen de Jesús Resucitado de los nazarenos se ha alternado con la mirada en las aplicaciones de lluvia de los móviles y al cielo en espera de las mejores noticias. 

A las once y media de la mañana el hermano mayor, Diego Conrado García, junto al párroco Javier Ruiz y el alcalde de Vélez Rubio Miguel Martínez Carlón salían la iglesia parroquial después de celebrar la misa de Resurrección hacia el convento para intentar sacar la procesión. 

Al final no ha podido ser. Y Jesús Resucitado se ha quedado en el interior del templo conventual ante la amenaza inminente de lluvia. Javier Ruiz, a los pies del Resucitado ha orado y ha pedido que “nada ni nadie nos quite la alegría de la Resurrección por la lluvia, Cristo ha Resucitado y esta es la mayor de nuestras esperanzas”.  Tras la oración, se ha organizado el cortejo encabezado por la banda pequeña, nazarenos y una trentena de valientes mujeres vestidas de con teja y mantilla blanca. Ha cerrado esta atípica procesión la Agrupación Musical del Santísimo Cristo del Perdón precedida por la presidencia religiosa y civil. 

Bajo el dintel de la iglesia esperaba la Virgen de la Esperanza la llegada de la procesión en una plaza de la Encarnación llena de paraguas. La lluvia de nuevo ha hecho aparición. A los pies de nuestra Señora de la Esperanza, don Javier ha hecho una nueva oración ante la atenta mirada de la multitud de vecinos que paraguas en mano han llenado el templo parroquial. Javier Ruiz ha pedido que “mantengamos viva la esperanza de la fe, la esperanza de un mundo mejor y más humano. 

Para finalizar, la Agrupación Musical ha interpretado varias marchas mientras el paso de la Virgen es mecido por el cuerpo de anderos. El hermano mayor, ha dado las gracias a todas las personas que llenaban en ese momento el templo por el trabajo y esfuerzo que hacen, lamentando que esta Semana Santa acabara pasada por agua pero con la mirada puesta en el año 2025. Así, Diego Conrado ha dado por cerrada esta Semana Mayor de Vélez Rubio.